En este post quiero poner de relieve algo que creo que todos hacemos, por más aficionados a la cocina que seamos, o por más planificadores que nos hayamos vuelto… esto es, el arte de la improvisación en la cocina.
Y sí, ayer por la noche, no teníamos nada previsto, una serie de temas personales había hecho que nos encontráramos a la hora de cenar, sin nada pensado. Lo que hicimos fue… abrir la nevera… ver lo que hay dentro, y elegir sabiamente. El resultado son estos Macarrones de “Supervivencia”.
La idea era coger elementos que fueran más o menos rápidos porque ya era tarde, y a la vez que nos gustaran a los dos adultos y las dos niñas. Los elegidos de la nevera fue un paquete de bacon en tiras que normalmente usamos en la pizza, unos pimientos de nuestras propias plantas, un culo que había de tomate frito casero y otro culito de una botella de vino afrutado.
Ingredientes
350 gramos de macarrones.
1 paquete de bacon a tiras.
2 pimientos verdes.
100 gramos de tomate frito casero.
100ml de vino blanco.
Ajo, cebolla y orégano en especie.
Aceite de Oliva Virgen Extra.
Preparación
Una de las claves aquí es la eficacia, o como hacer un plato que esté rico, de forma rápida y con ingredientes contados. Por lo tanto, lo primero, pusimos a hervir agua con aceite y sal.
Mientras el agua hervía, empezamos a hacer el sofrito, primero en una sartén con un poco de aceite de oliva, ponemos los pimientos (nos gustan muy hechos), previamente cortados en trocitos como de un centímetro o dos.
Al poco, ponemos el bacon para que se vaya dorando.
Cuando veamos que ya lleva buen color ambas cosas, vamos a verter el tomate, con el vino, y vamos a dejar que empiece a espesar poco a poco.
Mientras, que no se os olviden echar los macarrones en la olla del agua 😉 jeje.
Cuando este empezando a espesar, bajamos el fuego de la sartén, añadimos un poco sal, un poco de ajo y cebolla en especie. Lo vamos removiendo, para que vaya espesando, y por supuesto, que no se queme.
Cuando los macarrones estén hervidos, los escurrimos, guardando unos ml del caldo para poner en el sofrito, si vemos que ha espesado mucho.
Por último añadimos los macarrones a la sartén, ponemos un poco de orégano, y vamos removiendo mezclando bien los elementos.
Y… ¡Ya está listo para emplatar!. En menos de 20 minutos, todo hecho, listo y preparado, y lo mejor, es que estaba muy bueno.
¡Un abrazo!
Mónica