¡Hoy os traigo una receta que no es una receta como tal…bueno, si, pero se trata de:
¡¡¡Receta de jabón casero para la lavadora!!!
Nosotros la hemos preparado con ayuda de las niñas, ya que hay que remover bastante y a los niños pequeños les encanta remover, es algo mecánico pero se sienten implicados en el proceso y se divierten.
Este jabón es un jabón casero muy sencillo de preparar, muy barato, que cunde muchísimo y además sirve para todo tipo de ropa, ¡y de piel!
Nuestras hijas tienen la piel muy atópica, desde hace 5 años lavábamos todo por separado, con jabones especiales, suavizante especial pieles atópicas… vamos, que nos hemos dejado un pastón en jabones varios, y hemos tenido brotes de eczemas bastante grandes por tonterías como que una prenda de ellas haga un doble lavado y se mezcle en con la nuestra, o que la lavadora se atasque en un programa y no haga el doble aclarado que tenemos siempre programado.
Desde las primeras cacas de meconio (esa caca de bebé recién nacido que parecen petroleo y son, la verdad algo asquerosillas) siempre había pretratado las manchas con jabón de lagarto, el típico de las abuelas, que realmente limpia mejor que nunca, así que un día pensando en ello decidí buscar por internet y descubrí un montón de paginas con recetas diferentes de jabones caseros.
Algunas de ellas las descarté directamente por usar productos que no me parecían adecuados para pieles atópicas, otras tenían demasiado de algún ingrediente o demasiado poco de otro.
Primero empezó mi madre con los ensayos y luego fuimos perfeccionando la mezcla hasta encontrar una que nos gustase por su poder de limpieza.
Antes que nada diré que nosotros en casa somos muy fans de los productos naturales que muchas veces son los que mejor limpian. En este caso he preparado un jabón bastante suave y neutro, que sirve para las pieles más delicadas y desinfecta, pero en función de si es ropa especialmente sucia añado una cucharada de percarbonato al cajetín de la lavadora. El Percarbonato lo podéis encontrar en la sección de limpieza de cualquier supermercado, incluido el Mercadona.
Como suavizante lo mejor es un buen chorro de vinagre, deja la ropa limpia y sorprendentemente sin olor.
Ingredientes
*+- 10 litros de agua
1 pastilla o una bolsa de escamas de jabón de lagarto
Aceites esenciales. Yo he utilizado árbol de te y romero por sus propiedades desinfectantes y lavanda por su maravilloso olor
Preparación.
Primero de todo, si el jabón es en pastillas tendremos que utilizar un rallador y convertirlo en escamas.
Cogemos una cazuela bien grande (o repartimos en 2 algo más pequeñas, calcular que estamos hablando que en total acabaremos usando unos 10 litros de agua) ponemos unos 2 litros de agua para empezar, añadimos las escamas y ponemos la cazuela al fuego.
Cuando el agua está caliente, pero sin llegar a hervir empieza la parte divertida para los niños, que consiste en remover y remover sin parar, pero remover suavemente para no hacer mucha espuma.
Veremos que se empiezan a deshacer bien las escamas de jabón, entonces ya lo podemos apartar del fuego, y tenemos que seguir removiendo hasta que desaparezcan.
Empieza el momento paciencia.
Cuando la temperatura haya bajado a un punto que podamos tocar sin quemarnos es hora de añadir los aceites. Yo he puesto una cucharada sopera de cada uno. y volvemos a remover.
Se va enfriando y poniéndose a temperatura ambiente veremos que de golpe empieza a enfriarse de verdad, es el momento de empezar a añadir agua templada del grifo, que no queme, solo templada. y vamos añadiendo y dejando reposar.
Cuando enfría del todo, este jabón parece casi una gelatina, si lo hemos hecho bien con el agua tendremos un espesor justo, que no sea liquido, pero tampoco sólido. Nosotros lo metimos en botellas de litro y medio de agua, con ayuda de un embudo.
Antes de meterlo en la lavadora, tenemos que remover bien antes. Si veis que es demasiado espeso añadir un poco mas de agua. De cantidad uso un vaso medidor de los del jabón liquido de toda la vida… creo q son de 80ml.
Espero que os haya gustado, es una idea, de “cocinar” algo diferente, y oye, podéis ahorrar unos cuantos euros en jabones eh :).
¡Un abrazo!
Mónica